Desde la propuesta humanizadora del Evangelio, ofrecemos a nuestros alumnos la posibilidad de crecer en una comunidad educativa en la que aprendan a vivir como personas autónomas, libres y responsables.
Para ello, partimos de una educación integral de la persona y los ayudamos a valorar el trabajo, a desarrollar su sentido crítico, su creatividad y su conciencia moral.
Nuestro Proyecto Educativo se basa en el uso de metodologías activas y flexibles que garantizan la fidelidad a los principios pedagógicos y su constante actualización. Estas metodologías nos permiten ayudar a cada alumno a desarrollar su potencial individual y colectivo, fomentando la cooperación y la solidaridad.
Consideramos al alumno como el principal protagonista de este proceso, acompañado por educadores con iniciativa y capacidad de innovación, de trato cordial y cercano, que se constituyen en referentes activos de los valores y principios de nuestro Carácter Propio.